El viernes 28 de octubre vino Aída de nuevo a nuestra clase a hacer otro juego. Nos dio unas fichas en las que tenías que encontrar las parejas. Al encontrarlas, tenías que buscar a otro compañero de la clase que tuviera esa misma ficha y corregirla juntos y ver quién tenía razón.
No fue tan divertido como el primer día, pero estuvo bien.