LA MITOLOGÍA
CANTABRA
La mitología autóctona de Cantabria, desde sus orígenes
más remotos y con el paso del tiempo, se ha ido entroncado con los mitos
celtas y romanos, emparentándose en parte con leyendas y tradiciones del resto de la cornisa
Cantábrica.
Personajes
·
El Ojáncano.
Infortunio de Cantabria, esta criatura personifica el mal entre los cántabros y
representa la maldad, la crueldad y la brutalidad. Este gigante ciclópeo es
la versión cántabra del Polifemo griego
que aparece también en otras mitologías indoeuropeas.
·
La Ojáncana o
Juáncana. Mujer del anterior. Le gana a aquel en maldad, pues entre sus
víctimas se encontraban también los niños.
·
La Anjana.
Es la antítesis al Ojáncanu y la Ojáncana. Hada buena y generosa,
protectora de las gentes honradas, de los enamorados y de quienes se extravían
en los bosques y caminos.
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Los duendes.
Aquí se engloban a todos los pequeños seres de la mitología cántabra, traviesos
y burlones en una gran mayoría. Cabría distinguir entre los duendes domésticos,
aquellos que viven en el interior o en los alrededores de las casas de
Cantabria, como los trasgos y trastolillos, y
los que habitan el bosque, como trentis, tentirujos y zahorís.
·
Existen otros muchos seres
fabulosos que pueblan la rica mitología de Cantabria, como los Ventolines, la Osa
de Andara, los Caballucos del Diablu, los Nuberos, el Musgosu, el Culebre, el Ramidreju
, etc. O hermosas leyendas como la de la Sirenuca, bella moza desobediente y caprichosa
aficionada a trepar por los acantilados más peligrosos de Castro
Urdiales para
cantar al compás de las olas y por ello convertida en ninfa marina. O la del Hombre Pez, un joven de Liérganes al que le gustaba nadar y que se perdió
en el río
Miera, siendo finalmente
encontrado en la bahía de Cádiz transformado en un extraño ser acuático.
LA MITOLOGÍA EN LA ACTUALIDAD
Todos estos seres y
leyendas son prueba de la mentalidad mística de una época que respondió a la
necesidad de los cántabros de expresar sus miedos a internarse en un bello
entorno natural, pero a la vez abrupto, hostil y peligroso.
Hugo y Paula